"50 SOMBRAS DE GREY" O LA INVOLUCIÓN DE LA MUJER DEL SIGLO XXI

"50 SOMBRAS DE GREY" O LA INVOLUCIÓN DE LA MUJER DEL SIGLO XXI

CRÍTICA ENRIC 139


VALORACIÓN: 0/5   NO ESCAPA QUIEN QUIERE, SINO QUIEN PUEDE...

Era el año 1928 cuando D.H. Lawrence escribió "El amante de Lady Chatterley", libro erótico cuya trama versa sobre la infidelidad de Constance a su marido Sir Clfford Chatterley con Mellors, el guardabosque de la mansión familiar. La novela fue prohibida y censurada varias décadas, por lo que las mujeres que se lo podían permitir, tenían que recurrir al mercado negro para adquirir algún ejemplar que luego pasaría de mano en mano una vez leído. De la misma forma, existen otros muchos ejemplos de novelas que han abordado como tema principal la infidelidad como vía principal al erotismo o romanticismo. Podemos citar como ejemplo grandes obras de la talla de "Anna Karenina" de 1877 y "Madame Bovary" de 1856, anteriores a la obra de Lawrence.

Parece ser, que en tiempos anteriores, para la mayoría de las mujeres el máximo placer erótico se basaba principalmente en la remota posibilidad de poder violar el compromiso adquirido con un hombre por bajo el matrimonio. De todos es sabido, que el matrimonio en épocas anteriores tenía un reconocimiento y un respeto por parte de la sociedad diferente al que disfruta hoy. No existía la posibilidad del divorcio, el machismo y la sumisión de la mujer al hombre era algo que se daba por sentado, la mujer no tenía derecho al voto ni podía participar socialmente de la misma manera que el hombre. En fin, era todo esto, lo que posiblemente, hacía que una novela erótica fuera transgresora con la institución del matrimonio y recurriera a la infidelidad como principal argumento.

Pasan los años y la mujer va adquiriendo más y más reconocimiento, llega el divorcio, el derecho al voto y otros cambios en favor de ella, supuestamente fruto de la lucha y el sacrificio de diferentes movimientos revolucionarios. Es decir, entre otras cosas, el matrimonio ya no es impedimento para poder rehacer su vida, sin tener que tirarse a las vías del tren en caso de que ese cambio fracase cual Ana Karenina. La mujer ya no tiene que vivir bajo el sometimiento de un hombre, teniendo que fantasear en como sería su vida con otros.
Llega el año 2012, se publica en España "50 SOMBRAS DE GREY", y la mayoría de las mujeres se lanzan como locas a la búsqueda de ejemplares, que dicho sea de paso, están a miles en cualquier establecimiento. El libro se convierte en tema principal de conversación en cualquier tertulia de café de amigas y en los foros de las redes. No hay casi ninguna mujer que al leer el libro no lo recomiende a otra y esta a otra, llegando a convertirlo en todo un súper ventas que encabeza todas las listas de libros más vendidos.
¿Cuál es el hilo argumental de "50 SOMBRAS DE GREY"? El sometimiento de una joven virgen a un hombre (bajo contrato de mutuo acuerdo), eso sí, a un hombre en plenitud física, con gran belleza y con capacidad económica ilimitada. En el contrato, se barajan prácticas sexuales de sado masoquismo, lo cual no es nada nuevo, ya que hay referencias literarias al respecto mucho anteriores como "Justine" 1787 de Sade y "La Venus de las pieles" 1870 de Von Masoch, cuyos  apellidos dieron pie a los términos sadismo y masoquismo, llegando a "Historia de O" 1954.

LEOPOLD VON SACHER-MASOCH

MARQUÉS DE SADE

Podríamos decir según esto, que tras la pugna entre la literatura de la sumisión y la de la transgresión del matrimonio, en diferentes ciclos y a través de varios siglos, hemos llegado al siglo XXI con el aparente triunfo de la que se refiere a la sumisión. Y todo esto con el beneplácito de la mayoría de las mujeres, que así lo han demostrado al hacer de "50 SOMBRAS DE GREY" la obra de referencia del erotismo del siglo XXI, y ante la perplejidad de los hombres, los cuales ante este fenómeno, pasan desde intentar adoptar el papel de Grey (la mayoría fracasan, ya que no reúnen los requisitos del mismo), al extremo de desesperarse de forma inútil y estúpida con celos absurdos ante algo que no pueden controlar más que con la indiferencia. 

En cualquier caso, es alarmante la frivolidad con que puede pasar la mujer del siglo XXI a renunciar de forma tan explícita y banal a los derechos reivindicados y conseguidos durante siglos, al aceptar casi como un nuevo dios a CHRISTIAN GREY (discúlpenme las mujeres que son la excepción, que las hay y no son pocas), aceptando la sumisión que este personaje trata de imponer a sus víctimas; y digo víctimas, porque lo que no muestra esta película son las muchas víctimas que enferman debido al trato que él les da, que en los libros sí aparece. Al igual que es alarmante, la actitud de los hombres ante el personaje, que como he apuntado ya antes, pasan de tratar de emularlo a odiarlo, cuando lo que deberían es mantenerse indiferentes. Por no hablar de lo que supone el tratar de hacer creer a muchas adolescentes y jóvenes (con el visto bueno de las mujeres adultas), que pueden vender su virginidad a un hombre, siempre y cuando reúna los requisitos de este señor. Creo que para este tipo de hombres icono ya se hizo una película que era mucho más realista y coherente: "PRETTY WOMAN", que perjudicaba mucho menos la salud social. 

PRETTY WOMAN 1990

Mi conclusión es que la mujer del siglo XXI ha conseguido liberarse de la esclavitud que el  matrimonio ha llegado a suponer para ella, para caer en la esclavitud del fantasma de la contradicción: "no quiero el matrimonio pero adoro el sometimiento recompensado". Por mucho que quieran justificarse con ese contrato de sadomasoquismo entre los dos personajes, en su interior no van a poder engañarse a sí mismas, ya que lo que verdaderamente les atrae y es subyacente en el libro, es que les atrae la idea de sentirse sometidas a los deseos de un hombre. Pero de un hombre como Christian Grey, guapo, con mucho dinero y con muchas fantasías sexuales poco al uso (posiblemente muy parecidas a las que tienen todos los hombres). Ya no vale el guardabosques de la mansión de los Chatterley, ahora ya no solamente es una cuestión de satisfacer el sexo, sino el ego de que un hombre como Grey sea el amo.

¿Se da cuenta este tipo de mujer del siglo XXI de lo que está siendo su objeto de deseo? ¿Cómo se puede tener la doble moral de dar por bueno y oficial lo que repudiamos de otras culturas? Sí, el sadomasoquismo es una práctica sexual respetable más; pero como toda práctica sexual debe ser tratada como tal y no como una nueva religión en la que se idolatre a un hombre poderoso capaz de comprar y someter a una mujer. ¿Son mayoría este tipo de mujeres? Que cada uno se responda a sí mismo esta pregunta...

Resumiendo, la literatura erótica ha oscilado y pugnado entre la transgresión del matrimonio y el sado masoquismo o sometimiento, a lo largo de siglos. A día de hoy, se ha impuesto sin duda el sometimiento, pero el sometimiento de la mujer al hombre idealizado por ella. Y este ideal, ya no pasa por valores, sino por pragmatismo puro y duro, belleza y dinero. El príncipe azul ya no monta a caballo ni muere por su doncella, pilota helicópteros y conduce coches deportivos...

Por lo que respecta a la película, casi nada que decir. Actores sin oficio ni beneficio, guión que poco refleja del libro, técnica pésima del director más digna de un video amateur que de una súper producción. Un sinsentido de principio a fin que parece no terminar nunca y donde nunca aparece el erotismo prometido. Se ha notado mucho... Sabían que las muchas lectoras iban a ir sí o sí y poco han derrochado en al menos intentar hacer algo digno, más bien todo lo contrario. Una tomadura de pelo, pero que puede salir muy cara...

Por último, algunas recomendaciones para quien le guste el cine erótico de verdad:

ENRIC139